Loading...Hay muchas enfermedades de las que se conoce muy poco y sin embargo son muy peligrosas para quien las sufre o tiene riesgos de sufrirlas. Las enfermedades que afectan al cerebro son especialmente peligrosas, ya que de verse afectado puede detener el funcionamiento correcto de todo el cuerpo haciendo la vida diaria un reto. En este artículo le presentaremos Todo sobre la distrofia muscular, un pequeño informe para que se mantenga al día con los principales riesgos de las enfermedades cerebro-musculares.
La distrofia muscular se conoce por ser un trastorno genético que debilita los músculos de quien la padece dificultando los movimientos naturales del cuerpo.
Quienes padecen de distrofia muscular carecen de la información genética adecuada que ayuda a que el cuerpo produzca las proteínas que los músculos necesitan para estar sanos.
La distrofia muscular es algo con lo que las personas nacen, no se contagia ni se contrae.
Algunos pacientes presentan esta enfermedad desde que son bebés, algunos la desarrollan con el paso de los años, de cualquier manera se convierte en una enfermedad incapacitante.
En el caso de los adolescentes, hay diferentes tipos de distrofia muscular que pueden llegar a desarrollar, los más comunes son:
- Distrofia muscular de Duchenne: este es el tipo más frecuente de distrofia y es responsable de esta enfermedad la proteína denominada distrofina; esta proteína es la principal garante de un tono muscular firme y fuerte. Generalmente empieza a manifestarse entre los dos y los siete años y los jóvenes que la padecen se ven obligados a trasladarse en silla de ruedas.
- Distrofia muscular de Becker: de la misma manera que la anterior, este tipo de distrofia ataca generalmente al sexo masculino. Es muy similar a la distrofia de Duchenne, sin embargo es menos agresiva y tarda más en manifestarse.
- Distrofia muscular de Emery-Dreifus: los síntomas de esta distrofia se presentan generalmente a finales de la infancia, en algunos casos hasta los 25 años. Aunque también afecta a las mujeres, los hombres son los más afectados por este padecimiento, se presenta principalmente en hombros, brazos y espinillas.
Diagnosticar una distrofia muscular es algo que tras el primer padecimiento debemos llevar a cabo sin temer por los resultados ya que entre más rápido se actúe contra la enfermedad es mejor.
La electromiografia o EMG es un procedimiento en el que se utilizan corrientes eléctricas ya sea subcutáneas o superficiales para provocar un movimiento del músculo y así detectar alguna anomalía.
Si buscamos detectar algún proceso cerebral, en la página web de Neurogama nos garantizan tener el equipo necesario y tratamiento integral, responsable y profesional para con los pacientes.
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