Desde que se empezó a hablar de aborto se empezó a hablar de las posibles repercusiones psicológicas en la vida de quienes decidían abortar, abriendo toda una vorágine de rumores y temores en torno al mismo. El aborto no aumenta las posibilidades de que una mujer sufra trastornos psicológicos, a menos que tenga antecedentes de desequilibrios emocionales, pero un trastorno en una persona con antecedentes puede ser atribuido a prácticamente cualquier situación en la vida de la mujer.
Hace tiempo y para aclarar esta situación, un laboratorio inglés se dio a la tarea de realizar 44 estudios con la participación de cientos de miles de mujeres al rededor del mundo, los estudios comprendieron tanto a mujeres que abortaron como a aquellas que se encontraban pasando por un embarazo no deseado. La intención era comparar las condiciones emocionales de los dos grupos de mujeres para hacer una aproximación más clara a las verdaderas consecuencias del aborto.
Los resultados fueron completamente inesperados, ya que las mujeres que pasaban por un embarazo no deseado presentaron una tendencia más marcada a padecer ciertos trastornos psicológicos que aquellas que habían abortado, ya que quienes decidieron abortar, estaban seguras de querer hacerlo, pasaron por el procedimiento ya fuera con legrado o con pastillas abortivas y siguieron con sus vidas.
Para llevar a cabo este estudio se tomaron ciertas consideraciones importantes para no confundir un desequilibrio emocional con las sensaciones propias del ser humano después de una pérdida, así que los 90 días que le siguieron al proceso no fueron tomados en cuenta, así como también se excluyeron sensaciones como culpa, vergüenza y arrepentimiento, así se pudo conducir un estudio menos tendencioso.
Estos eventos fueron descartados del estudio pues se consideran reacciones pasajeras inherentes a un evento estresante y se pueden encontrar después de que la persona ha pasado por un momento de tensión muy pronunciado, sea el que sea incluida la interrupcion legal del embarazo.
Se pretende que este estudio ayude a las mujeres a sentirse más tranquilas al momento de tomar su decisión y también a minimizar un poco del efecto que, después de consultar estudios que hablaban sobre los efectos secundarios del aborto, esperaban presentar pues en muchos casos las mujeres sentían más culpabilidad de no arrepentirse del aborto que de haberlo realizado, lo que nos habla del gran impacto que este tipo de estudios tienen en la población.
Sobre todo es importante que las mujeres sepan que es su cuerpo y que la decisión que tomen debe ser únicamente de ellas.
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