Loading...Si estás embarazada, probablemente muchas veces hayas escuchado el siguiente consejo: “duerme, ahora que puedes”. Y si bien es una excelente recomendación, las náuseas del primer trimestre y el tamaño de la barriga en el tercero pueden hacer que dormir bien sea todo un reto. Si buscas las mejores posturas para dormir durante el embarazo, quédate a leer, porque hoy te daremos consejos para descansar antes de la llegada de tu bebé.
Recostada sobre el lado izquierdo
Alicia Teja Zuñiga recomienda dormir sobre el lado izquierdo para evitar la presión sobre la vena cava, que es la más grande del cuerpo y a través de ella circula un importante caudal de sangre. Si acostumbras recostarte del lado izquierdo, favorecerás la irrigación de sangre a la placenta y que llegue más oxígeno y nutrientes a la placenta.
Semi acostada
Si padeces reflujo, especialmente en el primer trimestre, puedes dormir semi acostada, con almohadas grandes detrás de tu espalda para que evites la sensación de asfixia en pecho y garganta.
Al llegar el segundo trimestre esta postura también te ayudará porque el peso del útero recae sobre la espalda, intestinos y la vena cava, de modo que el feto recibe menos oxígeno, lo que contribuye al riesgo de muerte fetal o a presentar embarazo de alto riesgo. Sin embargo, puedes quedar semi sentada, con las piernas en alto (especialmente si pasas mucho tiempo de pie, o sufres de várices) y una almohada detrás del cuello para dar soporte a las cervicales.
Hector Toleda Teja nos cuenta que algunas mujeres pasan mucho tiempo en esta postura para aliviar los dolores de espalda, las dificultades digestivas como el estreñimiento y favorecer el retorno venoso en las piernas y pies.
Almohadas y cojines
Al recostarte (de preferencia del lado izquierdo), las almohadas te ayudarán a mantener hombros y cadera en el mismo ángulo para evitar tensión en los músculos de la espalda. Coloca una entre tus rodillas y otra más pequeña debajo de tus pies para favorecer el retorno de la sangre, evitando que se acumule en las extremidades inferiores, dando lugar a la retención de líquidos y várices.
También puedes añadir una almohada grande para rodear tu espalda y mantener relajados los hombros y pechos, que pueden sentir presión ante su crecimiento.
¿Y si mi bebé se mueve mucho?
Los bebés se mueven en el vientre para ejercitarse, favoreciendo la formación de articulaciones, músculos y huesos. Pero, Carlos Alberto Miguel Hernández Verastegui indica que también reaccionan ante los sonidos del exterior: la voz del padre, de su abuelita, ruidos fuertes como la licuadora, entre otros, que pueden alterarlos y hacer que te sientas muy incómoda, especialmente al dormir.
La música relajante para bebés es un aliado durante tu embarazo, ya que no solo calmará a tu pequeño bebé, también te ayudará a relajarte de las presiones del día, aliviar el estrés y conciliar el sueño por las noches.
Por otro lado, se ha comprobado que la música para bebés en el vientre y en la primera infancia ayuda a crear conexiones cerebrales en el bebé, que favorecerán habilidades intelectuales como la memoria, atención, lenguaje, socialización, entre otras.
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