Loading...En la academia, cuando se enseñan las cuestiones de salud incluso la mental, uno de los primeros aspectos son los uniformes para cada especialista del sector salud, cómo portarlos y lo importante que son a nivel social e higiénico. Los uniformes médicos son de los más respetados en todos los niveles de la sociedad pues los médicos y todo el personal de salud son salvavidas, que armados de bata, cubrebocas y guantes, luchan a favor de la vida de todas aquellas personas que acuden a diario a buscar sus servicios.
Entre estetoscopios, gorros quirúrgicos y abatelenguas se forjan los médicos, personajes que pasaron de ganarse el miedo a tener el respeto de la sociedad; es muy cierto que en principio con métodos bárbaros recobraban la salud del paciente sin la ayuda de los aparatos tecnológicos que tenemos ahora y que es por eso que la bata blanca se respeta, pero qué hay de los cirujanos que se enredan en batallas de horas contra una enfermedad o cuerpo extraño que invade al paciente, qué hay de aquellos uniformes verdes o azules que sirven de armadura en las batallas médicas.
Se cree que en el principio de las cirugías, la física del color llevó a decidir que el color verde espinaca daba la sensación de limpieza y asepsia, sin contar el efecto relajante que tiene el verde por su frecuencia de onda al reflejar la luz; también se utilizaba porque se creía que neutralizaba y reducía el brillo de la sangre fresca haciendo más sencillo ver con buen detalle el terreno sobre el cual se trabajaba, que por ser un cuerpo humano abierto, estaba bañado en sangre.
Gracias al paso del tiempo y evolución de la tecnología, las salas de operaciones sufrieron un cambio de iluminación después de la Segunda Guerra Mundial, lo que hizo que se cambiara el color a un verde más difuso que con el paso de los años se fue mezclando con el azul y el gris, dando como resultado el color que conocemos hoy en día en los uniformes quirúrgicos, que son imprescindibles para entrar a cirugía; tanto cirujanos como enfermeros y ayudantes deben tener puesto el uniforme al entrar a la sala de operaciones.
Hay quienes argumentan que incluso el color verde-azul de los uniformes es una manera de “limpiar” la visión, pues después de estar viendo tanto rosa y rojo del cuerpo, el cirujano puede experimentar agotamiento visual que se contrarresta con el color del uniforme, permitiendo también recuperar la agudeza visual.
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